"Ninguna etapa de la evolución del hombre ha planteado tan cruel y deshumanizado desafío como la era digital actual y su transformación del conocimiento, entendida ahora como extensiones de nuestra mente que sirven al mercado para la manipulación, dominación, ausencia de autonomía, de libertad, de voluntad. Y esto para la vida en el planeta es igual a los graves efectos de los gases de efecto invernadero, o al impacto de una pandemia."
JUAN JOSÉ ANDRADE GIL
Politólogo Red Distrital Pensamiento Sostenible - Bogotá D.C.
Postulado a Instructor Voluntario IVOL
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REDACCION / FOROCHAT.COM.CO
Editor: Jaider Monsalve-Valinor19
Las redes sociales están estructurando en el mundo de la revolución tecnológica a un nuevo ser humano no humano, todo en la medida de cambiarlo para mal, pues solo interesa más y más dinero para el negocio. ¿Cómo lo hacen? aplicando algoritmos a fin de alterar la soberanía emocional del individuo logrando manipular el miedo, la ansiedad, el narcisismo, el enojo, la lujuria, la envidia, en resumen, todas las debilidades humanas que les permiten hacernos prisioneros de las plataformas digitales. Para el 2030 ya seremos otros, habrán cambiado todo lo que somos.
Tal vez ya sea demasiado tarde para abrir los ojos ante acontecimientos muy claros. Los mercaderes de la revolución tecnológica aplaudieron a la llegada de la pandemia la digitalización como salvavidas cuando se tuvo que cerrar la economía, pero el encierro digital deterioró la salud y vida activa de miles de millones de niños y jóvenes alrededor de todo el planeta al sumergirlos en la depresión, ansiedad e inutilidad para resocializar, crear, imaginar, e innovar.
Ninguna etapa de la evolución del hombre ha planteado tan cruel y deshumanizado desafío como la era digital actual y su transformación del conocimiento, entendida ahora como extensiones de nuestra mente que sirven al mercado para la manipulación, dominación, ausencia de autonomía, de libertad, de voluntad. Y esto para la vida en el planeta es igual a los graves efectos de los gases de efecto invernadero, o al impacto de una pandemia.
Ignoramos que las redes sociales son agujeros digitales programados por algoritmos para sembrarnos horas, tardes y noches enteras frente a la pantalla que termina conociéndonos más que el papá, la mamá, y en general la familia. Ante el mundo digital dejamos hace rato de ser sujetos, solo somos objeto de un negocio de alcance global con más dinero que veinte Estados del mundo juntos.
El gobierno del pensamiento parece ser la clave ante el gobierno del mal. En este bloq
forochat.com.co he leído apuestas salvadoras como las cieloterapias de la Red Mundial Buen Vecino, valido para otros practicar el yoga, amen de muy diversas alternativas. Lo importante es detenerse en la clave salvadora de volver a viajar a nuestro interior, a la contemplación, al sencillo diálogo interno que nos entrena para recibir y clasificar lo que mediante ráfagas incesantes nos llega a la mente pretendiendo a toda costa cambiar lo que somos, inducirnos a reaccionar conforme un dictado de oscuros intereses, nos queda entonces como única reacción de nuestra voluntad preguntarnos a menudo ¿Qué pasa en mi mente? ¿Qué reacción me quiere provocar este post que estoy viendo?
Es ahora que le encuentro sentido a mi madre cuando a menudo exclama la frase ochentera
"querer es poder" porque es apelar a la autonomía del ser, pienso que no es del todo ilusa e idealista. Hay que volver a gobernar nuestra mente gobernando la máquina, revisar nuestras rutinas para volver a la poesía que extiende el mundo en naturaleza, ser decididamente retro desempolvando los libros que nos aterriza y nos invita a construir, salir a encontrarse a cielo abierto y desintoxicarnos abrazando el árbol mientras caminamos los senderos a pies descalzos.